Me miro en el espejo y mi lenguaje se expresa a traves de mis manos, mis ojos, todo mi cuerpo, mi voz. Me miro y me reconosco. Esa soy yo. La que siente lo que dice, lo que vé.
Soy receptora de mi propio yo.
Y me observo como una espectadora tambien.
Quiero entender, cuanto doy yo a los demás, cuanto comunico, como hago sentir a traves de mi arte a la gente.
Y me observo como una espectadora tambien.
Quiero entender, cuanto doy yo a los demás, cuanto comunico, como hago sentir a traves de mi arte a la gente.
Ese es el oficio del artista:
Comunicar cultura.
Comunicar cultura.
Me acuerdo de las sabias palabras de Galeano en una hermosa historia:
“ Cuando es verdadera, cuando nace de la necesidad de decir, a la voz humana no hay quien la pare. Si le niegan la boca, ella habla por las manos, o por los ojos, o por los poros, o por donde sea. Porque todos, toditos, tenemos algo que decir a los demás, alguna cosa que merece ser por los demás celebrada o perdonada.”
“ Cuando es verdadera, cuando nace de la necesidad de decir, a la voz humana no hay quien la pare. Si le niegan la boca, ella habla por las manos, o por los ojos, o por los poros, o por donde sea. Porque todos, toditos, tenemos algo que decir a los demás, alguna cosa que merece ser por los demás celebrada o perdonada.”
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